Honoris Causa
Rubem Fonseca y su clase magistral...
Aunque no está acostumbrado a los actos pomposos hoy al mediodía se llevó a cabo la ceremonia (en la Casona de la Universidad Mayor de San Marcos) de otorgamiento del título Honoris Causa al maestro Rubem Fonseca; su discurso -el más esperado por todos- fue de lo más informal y rompiendo los moldes establecidos (leer en el podio); el escritor se movió de un lado a otro para contarnos su experiencia de cómo se hizo escritor y el porqué se hizo escritor. El secreto -según el maese Fonseca- está principalmente en ser un lector compulsivo, no se necesita ni siquiera ser inteligente. Luego la imaginación (que todo ser humano lo tiene pero no lo explota): un escritor que escribe una novela para contarnos sobre su vida es un mal escritor; la vitud de la paciencia, y el coraje de decir aquello que nadie quiere oir. Una vital y motivadora clase magistral, gracias maese Rubem.
PD.-Luego de la ceremonia se pasó al patio de la Casona para el brindis de rigor. La cantidad de angurrientos de sanguchitos, gaseosas y vino, era increible.
Rubem Fonseca y su clase magistral...
Aunque no está acostumbrado a los actos pomposos hoy al mediodía se llevó a cabo la ceremonia (en la Casona de la Universidad Mayor de San Marcos) de otorgamiento del título Honoris Causa al maestro Rubem Fonseca; su discurso -el más esperado por todos- fue de lo más informal y rompiendo los moldes establecidos (leer en el podio); el escritor se movió de un lado a otro para contarnos su experiencia de cómo se hizo escritor y el porqué se hizo escritor. El secreto -según el maese Fonseca- está principalmente en ser un lector compulsivo, no se necesita ni siquiera ser inteligente. Luego la imaginación (que todo ser humano lo tiene pero no lo explota): un escritor que escribe una novela para contarnos sobre su vida es un mal escritor; la vitud de la paciencia, y el coraje de decir aquello que nadie quiere oir. Una vital y motivadora clase magistral, gracias maese Rubem.
PD.-Luego de la ceremonia se pasó al patio de la Casona para el brindis de rigor. La cantidad de angurrientos de sanguchitos, gaseosas y vino, era increible.
1 Comentarios:
¿entre los angurrientos no estaba No Future Ubias, como cuando se lanzaba a devorarse los sánguches y demás bocaditos que repartían en el Consejo de Facultad de la USMP?
Publicar un comentario
Suscribirse a Comentarios de la entrada [Atom]
<< Página Principal