Inepto

¿Porqué no se va?

No sé si fue Santo Tomás de Aquino o San Agustín quien decía aquello de que cometer un error: es aceptable, cometer por segunda vez el mismo error: podría perdonarse; pero errar sobre lo mismo por tercera vez resulta ya un acto diabólico. Diabólico y estúpido habría que agregar. Al señor Antero Florez Araoz el puesto de Ministro de Defensa le ha quedado grande. El tipo no atina ni una. Lo peor es que cada respuesta que dá a alguna pregunta incómoda que se le hace por su inacción esta resulta de una arrogancia que ya raya con la más penosa torpeza del ser humano. El hombre no sabe cómo explicar lo de la cobarde emboscada narcoterrorista de la que fue víctima el pasado jueves un grupo de jovenes soldados que patrullaban por el VRAE. El ni enterado, estaba en la luna de paita, seguro que la noticia lo agarró tomando solcito en su casa de playa. Pero el culpable no es él, el culpable es el gobierno que lo mantiene aún en su puesto y no sabemos que está esperando para librarse de este inepto; porque esperar que el señor Antero Florez Araoz renuncie a su cargo es bien complicado ya que es un viejo político peruano, y como todos sabemos: todo viejo político peruano en el fondo es un conchudo.