viernes, julio 27, 2007

DIVAGACIONES PATRIÓTICAS.....

El Perú es un país de esperanzas, vive emborrachado de esperanzas desde su independencia. ¿Qué es lo que aún nos mantiene en pie? ni idea. Pudimos haber sido destruido como país pero sin embargo aquí estamos con la misma mugre que siempre aquejó a nuestra República y que hoy se alienta desde el sector más mercantilista, poderosa e inútil de la clase empresarial (alias Confiep) tan acomplejada y tan atragantada de imbecilidad por los siglos de los siglos; la misma mugre que brilla en la multitud de gentes cuando hace vivas a cada bellaco que no hace sino atiborrarle de mentiras y promesas, es el proletariado y la clase media menesterosa e ignorante que constituyen las heces del país, tan repugnante como sus actuales intelectuales y escritores: una madriguera de adulones y lamentosos literatos. ¿Qué celebrar entonces? hay mucho por celebrar en cualquier fecha del año: somos un país con pasado histórico, aquí yacen los trazos de pueblos de hace 5 mil años de existencia, celebro Machu Picchu y los vestigios de un Imperio, celebro la existencia del Cuzco, celebro el mestizaje y su música popular, celebro mis contradicciones y en ese sentido celebro mi odio y mi amor por Lima, Lima es la expresión de la República mediocre, pero Lima me dio todo: pocos amigos pero díscolos como uno, suficiente para llevarnos bien , me dio a mi mujer y su sonrisa diaria, y me dio a conocer estos hombres de gran valía para mi existencia: Guamán Poma de Ayala, Garcilazo de la Vega, Manuel Gonzales Prada, Abelardo Gamarra, José Carlos Mariátegui, Abraham Valdelomar, Alberto Hidalgo, Federico More, César Vallejo, Carlos Oquendo de Amat, Martín Adán, José María Euguren, Salazar Bondy, Jorge Basadre, Juan Gonzalo Rose, Mario Vargas Llosa, Oswaldo Reynoso, Jorge Pimentel, Julio Ramón Ribeyro, Blanca Varela, Luis Loayza, y Alfredo Bryce (la lista es larga).

Si he de ver a mi patria, cojo el cuchillo y me coloco los ojos y el pensamiento de Ramón, aquel solitario y lejano barranquino que aparece en la Casa de Cartón, allí yace la mixtura Peruana y riego de orine a los personajes indigenistas. Mañana 28 de Julio, mes patrio, mes de parada militar, habrá que escupir con flema al escudo nacional y prender vela a la fotografía donde aparece ido, muy ido: Martín Adán, tan lóbrego como el pasadizo de un manicomio, el poeta lleva puesto su gabán negro y un imperdible que sustituye al botón del sacón , entonces y solo entonces, no habrá otra tierra más hermosa que el Perú.

miércoles, julio 25, 2007

ROBERT MUSIL y EL JOVEN TÖRLESS..

Hace muchos año un marica de la católica (perdonen la redundancia) que la iba de estudiante para leguleyo y futuro escribiente de la muletilla jurídica Otrosí digo nos recomendó la obra “Las tribulaciones del estudiante Törless” del austriaco Robert Musil. En aquel entonces no hice mucho caso a la recomendación del tipejo porque, entre otras cosas, desconfiaba de su pose de fraile de levita (viniendo de la casa fundada por Riva Agüero, toda contaminación divina se puede esperar). Mis días pasaban por las cavernas más oscuras de Beckett y el torrencialismo irónico de Voltaire. Poco tiempo después ubiqué la obra de Musil en una muy surtida biblioteca Limeña. La pedí prestada y la maldita memoria se olvidó en devolverla. Nunca la leí sino hasta hace dos meses, habiendo ya transcurrido una buena punta de años desde que supe de este escritor. Dos comentarios al respecto: 1) Es una gran obra y 2) Los ripiosos, como el marica, a veces aciertan y son unos benditos, y los prejuiciosos como este escriba: unos reverendos "imbeciles".

martes, julio 24, 2007

PERIPLO POR LA FERIA DE LIBROS DE LIMA...

Cristian me dice que en esta feria de Libros no ha encontrado nada que valga la pena. Cristian luego camina orondo hacia la puerta de salida de la feria cargando consigo cinco bolsas repletas de libros que acaba de adquirir en la feria. De seguro en un pic nic campestre y bucólico (a las orillas de un río en cieneguilla) el buen Cristian lleva como merienda Mac Donalds y papas fritas. Yo regreso a las instalaciones de la feria y, como si fuera un buscador de oro en la California del siglo XIX, empiezo con mi labor de escarbar en los stand de libros viejo (me cuido en decir Librería de viejo o librero de viejo, porque esas/esos están lejos de tener tal categoría). Encontrar oro en medio del polvo y el inmenso basural gráfico que allí se vende, he ahí la vaina. Sin embargo lo he conseguido, he hallado estas pepas magníficas que a continuación doy cuenta al lector : 1)Hombres y bestias y 2)Biografía de Yomismo, ambas obras escritas por mi Santo: el escritor Alberto Hidalgo. Los cojo con cuidado, casi con suaves manos de señorita, es la voz de la memoria la que yace aquí, en estos viejos textos que ni el tiempo, ni la mala leche de sus enemigos, pudieron derrotar.